En sesión plenaria del Senado del 12 de diciembre, el senador Roberto Gerlein presentó una proposición donde solicitó sacar del orden del día el Proyecto de Reforma constitucional que buscaba reconocer a los campesinos como sujetos de especial protección, con el fin de avanzar hacia la justicia social para el campo y sus habitantes. La plenaria aprobó la proposición con 28 votos a favor frente a 25 en contra.
De haber sido aprobada la reforma constitucional, el campesinado colombiano pasaría a ser un sujeto de especial protección. Así el Estado colombiano debería promover políticas para proteger la cultura y la economía campesina. El proyecto también buscaba que se reconociera el derecho a la tierra individual y colectiva. Así las familias y las comunidades campesinas tendrían la posibilidad de ser titulares del derecho a la tierra, y el territorio, y que el Estado reconociera el trabajo que las comunidades campesinas han desarrollado para defender la producción agropecuaria, el agua, los bosques y otros bienes comunes.
El proyecto también reconocía el derecho a las semillas, garantizando que los campesinos no vieran restringido su derecho a guardar, intercambiar o mejorar las semillas nativas.
"En momentos que el país camina hacia la solución política del conflicto armado y donde crece la movilización social por la defensa social del territorio, dicho proyecto tenía una inmensa importancia. El Senado de la República, al permitir el hundimiento de tan importante iniciativa, envía un pésimo mensaje al campesinado colombiano que históricamente ha sido condenado al abandono por parte del Estado", afirmó el senador campesino Alberto Castilla, autor de la frustrada iniciativa.