El propósito de este proyecto de ley, es el de reglamentar los temas referentes a la pólvora, acabando con la clandestinidad y estableciendo los requisitos para regular la fabricación, transporte, almacenamiento, uso y manipulación, permitiendo la actividad pero en cabeza de personas expertas y no permitiendo que menores de edad y personas inexpertas usen o manipulen este tipo de elementos, de esta manera encontramos que el problema de los niños quemados, la explosión y el potencial peligro de las polvorerías clandestinas son clara demostración de que a las autoridades les corresponde asumir un papel más activo y eficaz que permita garantizar el cumplimiento efectivo de las normas vigentes.