El Estado colombiano garantizará el derecho fundamental al agua y el saneamiento en condiciones de disponibilidad, accesibilidad, aceptabilidad y calidad como garantía de vida y salud para todas las personas, sin discriminación y con equidad para todas las poblaciones. Las aguas en todas sus formas y sus fuentes son bienes de uso público inalienables, imprescriptibles e inembargables. Se considerarán estratégicos y de interés prioritario para la nación los ecosistemas fundamentales para la generación, protección y mantenimiento del agua, por tanto, tales ecosistemas tendrán especial protección, ordenación, conservación, restauración y manejo sustentable e integral a cargo del Estado. Para garantizar el agua limpia, suficiente y potable el Estado Colombiano incluirá como parte integral del Plan Nacional de Desarrollo un Plan Nacional de Aguas, que contará con la participación ciudadana, de las comunidades afrodescendientes e indígenas y de las autoridades ambientales de la respectiva cuenca hidrográfica.