Este proyecto de ley busca de manera particular y concreta desafectar los terrenos de Bajamar (Tumaco), una vez reconocido su cambio de naturaleza mediante ley, para que tales suelos puedan ser susceptibles de apropiación y ser sujetos de licencias urbanísticas. En los términos de la Ley 388 de 1997, al otorgarles el carácter de bienes baldíos dentro del perímetro urbano, la Nación podrá transferir los terrenos al municipio.