El Estado invertirá las sumas previstas en el articulado del proyecto, para abonar a las obligaciones vigentes que hubieran sido contratadas con las universidades colombianos, destinadas a la financiación de la matrícula individual de estudiantes que estén en mora en sus créditos educativos y que hayan aprobado satisfactoriamente sus semestres académicos. Se autoriza la creación de un Fondo de Reserva para la Estabilización de Cartera Educativa que será administrado por el Banco de la República.