La prevención y atención de incendios, de calamidades conexas y de los siniestros, como consecuencia de fenómenos naturales, espontáneos o humanos, es responsabilidad de todas las autoridades y de los habitantes del territorio colombiano. En cumplimiento de esta responsabilidad, los organismos públicos y privados deberán contemplar la contingencia de estos riesgos en los bienes muebles e inmuebles, en los parques naturales, en las construcciones y en programas de desarrollo urbanístico e instalaciones y adelantar planes, programas y proyectos tendientes a disminuir su vulnerabilidad.